Nuevamente pongo el cartelito de “cerrado por vacaciones” al
blog. Me asombro al darme cuenta de que es la tercera vez que lo hago. Cuando
comencé esto de montar un fotoblog nunca pensé que su vida iba a ser tan larga
ni tampoco que la aceptación sería tan buena.
El caso es que aquí estamos un verano más echando la
persiana y con ganas de descansar. No dejaré de lanzar miradas furtivas y si la
cosecha es buena os la enseñaré a partir de septiembre. Mientras tanto
descansad vosotros también: de todo, de mí.
Intentad manteneros alegres.